Hoy continuamos con el tema del amor y su desintegración en la sociedad actual

Hola a tod@s:

Dedico la columna de hoy a las personas que recientemente estuvieron de cumpleaños: Carlos Sánchez, Leidy Polanco, Rosa Elena Puntiel, mi primo Jesús (Chuchy) Hernández, Rafael Guzmán Fermín,  Louise Walsh, Kenia Placencio, Patria Valentín, Delma Mercedes, Wilda Acosta, Ángel Ramírez, Erwin Lantigua, Mildry Feliz,  José Miguel González Rossi, Bélgica María, Stanley Mercedes, mi primo Brian Rosado Fermín, Ivelisse Marte, José Alberto Hernandez, Binot Basnet, Paula Grajales, Miguel Toribio, el niño Alejandro Hernández Inoa, Venus Balbuena, Makoto Sumida, Patrick Night, Norvin Alcántara, Virgilio Antonio Feliz, y en el día de hoy Sócrates Espinal, Marina Mazza, Sachio Morit y Martha Gómez. Agradezco los hermosos comentarios que me inspiran de: Nelly Ramos, Yissel Yangüela y los seguidores de Facebook Mayra NG, María Reyes, Elizabeth Martínez, Chuchy Hernández, Andrés Paulino e Ivelisse Marte, para todos los lectores muchas bendiciones.

Hoy continuamos con el tema del amor y su desintegración en la sociedad actual, basado en libro el Arte de Amar del escritor Erich Fromm. Los autómatas o sea aquellas personas que actúan como máquinas, personas que actúan por impulso y no por sentimientos,   no pueden amar, solo pueden negociar y confiar en que la negociación sea equitativa; y el amor se convierte en un refugio para la soledad y el egoísmo.

El amor para este tipo de personas no es más que el equivalente al placer sexual recibido, de modo que piensan que así se podrá amar. Sin embargo Erich Fromm afirma que la verdad es todo lo contrario, el amor no es el resultado de relaciones sexuales satisfactorias sino que la felicidad sexual es el resultado del amor.

Las pruebas se pueden hallar en los estudios realizados sobre los problemas sexuales más frecuentes, como la frigidez en las mujeres y la impotencia psíquica en los hombres, que demuestran que la causa de estas dificultades no es la falta de conocimiento de las técnicas sexuales supuestamente correctas sino de las inhibiciones que impiden amar. La próxima semana continuaremos con este interesante tema.

Mi reflexión personal de esta semana, a partir de hoy comenzaremos unos tips durante varias semanas para hablar de los hábitos que necesitamos cultivar para alcanzar el éxito, y esos hábitos comienzan creyendo en nosotros mismos, aceptando que somos capaces, excepcionales y disfrutando al máximo todo lo que hemos soñado. El habito # 1: Creer en uno(a) mismo(a) sin importar lo que digan. Significa que debemos dejar de basar nuestra autoestima en la opinión que los demás tengan de nosotros. Si aprendemos a conocernos internamente, y aceptamos nuestras virtudes y trabajamos con nuestros defectos, logramos creer en nosotros mismos y en todo el potencial que tenemos dentro para lograr lo que queremos. Les exhorto y animo a que hagan un listado de todas las cualidades positivas que poseen y se sorprenderán del maravilloso potencial interno que hay en cada ser humano.

Les dejo una frase bíblica para meditar: "Ninguna palabra de todas las promesas que Dios hizo, ha faltado" Primera Reyes 8:56.

Entren a este link con derecho de autor, que encontré en una página pública,  para que escuchen esta versión de la canción Cuan grande es el del cantautor Marcos Witt, pero en una versión diferente y muy hermosa por la cantante Cristal Lewis,  cuyas letras dicen Señor mi Dios al contemplar el cielo, el firmamento en las estrellas vi,  al oír tu voz, en los potentes truenos,  y ver brillar el sol y su sentir,  mi corazón entona la canción Cuan grande es El, cuan grande es El, mi corazón entona la canción Cuan grande es El (se repite), cuando recuerdo el amor divino, que desde el cielo, ha salvado mi Dios, aquel Jesús que por salvarme vino, y en una cruz por mi murió,  (se repite el coro), cuando el Señor, me llame a su presencia, al dulce hogar, al cielo de esplendor, le adorare, cantando la grandeza, de su poder e infinito amor entren a:  http://www.youtube.com/watch?v=eXqWfoZsfFU

Feliz resto de la semana y muchas bendiciones,

 

Marisol